Ayer llegaron las delegaciones de los 27 países a Luxemburgo proponiéndose crear un nuevo mapa agrícola para la Política Agraria Común (PAC). Los ministros lo harán hoy. El equipo de Miguel Arias Cañete lleva una propuesta muy ambiciosa e interesante.
España, Francia e Irlanda conforman un mismo frente. Portugal, Italia, Polonia y Malta las apoyan puntualmente. Holanda, Gran Bretaña, Alemania y los países nórdicos, no están tan de acuerdo. Y hay que llegar a un acuerdo.
El comisario de Agricultura, Dacian Ciolos, lo tiene muy claro: “Haré lo posible por cerrar un acuerdo antes de final de mes”. Los 27 países acuden a Luxemburgo con la idea de rematar la PAC.Las ayudas y las reglas para el mercado de 105.000 agricultores y ganaderos de Jaén dependerán hasta 2020 de lo que se acuerde en dicho lugar.
El olivar, es el cultivo que más necesidad tiene de un acuerdo. España tiene un plan claro para que Jaén y el resto de provincias españolas no pierdan dinero o, no se produzcan trasvases de fondos entre territorios y cultivos. Las comunidades autónomas lo apoyan.Sin embargo, necesita el visto bueno de la Comisión Europea y del Consejo de Ministros de Europa. En Luxemburgo, el lunes y el martes, tienen la clave. Sin embargo,el domingo los técnicos de las delegaciones comenzaron los primeros contactos. La secretaria general de Agricultura, Isabel García Tejerina, dirigirá las conversaciones de España. La idea es que hoy lunes, cuando llegan los ministros, las alianzas estén bastante avanzadas.
Jaén recibe alrededor de 423 millones de euros en fondos de la Política Agraria Comunitaria (PAC) y no quiere renunciar a un solo céntimo. No obstante, el ministro Miguel Arias Cañete ya dijo que las ayudas no serían las mismas porque es imposible que cada comunidad autónoma perceptora, reciba el mismo dinerodado que el sistema de reparto tiene que cambiar, debido a una cierta despreocupación de los pilares.
El bloque España, Francia e Irlanda junto con la Comisión Europea apuestan por el acuerdo. Irlanda ocupa la presidencia ahora. En cambio, a partir del 1 de julio, Lituania coge el mando, lo que podría perjudicar a los intereses agrarios de España.
La propuesta de la Comisión Europea pretende desvincular las ayudas, a la producción e incentivar la actividad y eliminar los derechos históricos, que son los que han dado,tiempo atrás, un escenario bastante aceptable a Jaén respecto a los demás. España lleva casi dos años esforzándose para lograr la manera de cumplir con la Comisión Europea, y a su vez, mantener un sistema de ayudas similar al actual. Lo que se plantea,no ha de tratarse como un asunto baladí, porque conllevaría que mucho dinero que llega a Jaén se marchara a otras tierras y cultivos. No obstante, presentará un plan en Luxemburgo que busca la acepatación de los 27 ministros y de la Comisión Europea. Fuentes del Ministerio explican que se pondrá encima de la mesa un innovador mapa agrario que establecerá nuevas regiones. El sistema de ayudas se complica cada vez más. Los derechos históricos individuales de cada agricultor desaparecen y las subvenciones llegarán de otra manera diferente. España ha dividido el mapa geográfico en comarcas y le dan como resultado más de 1.000. Y obviamente, así no se puede establecer un sistema de reparto de fondos. No obstante, se atreve ha avanzar un poco más,comenzando a agrupar territorios similares en cultivos, producción y niveles de apoyo. El Ministerio busca coincidencias agrícolas. Así, llevará entre 35 y 45 regiones, que tendrán un nivel similar de apoyo en el nuevo panorama de Europa.
De esta manera, cada productor, tendrá que mirar en qué región se le ha ubicado porque contarán con un régimen diferente. De hecho, se regularán según las ayudas individuales que reciben las personas que viven allí, las comarcas territoriales y el tipo de cultivo. De esta manera, Europa quiere evitar el abuso de derechos, que no paran de recriminarse a España continuamente. El Ministerio de Agricultura lleva este plan desde la premisa de que el campo español es muy variado, y una tasa plana, destruiría esta singularidad y poniendo en peligro a miles de productores y explotaciones.
De hecho, la tasa plana,no tendría consecuencias excesivamente devastadoras, en los países del norte porque tienen una agricultura con pocos cultivos. En cambio, en el sur sería una auténtica catástrofe. La Comisión no quiere una regionalización de la PAC, pero el equipo de Miguel Arias Cañete tendrá que pelear para que se reconozcan estas regiones dentro de la Comisión Europea.
Jaén también está amenazada por la entrada de nuevas hectáreas, y un recorte generalizado.Actualmente, existen 38 millones de hectáreas susceptibles a recoger fondos. En cambio, parece que está casi consensuada la propuesta de Irlanda, que favorece a España. Así, serían 22,3 millones.
Queda el “Pago verde”, que es el compromiso ambiental del agricultor. La Comisión pide rotación de 3 cultivos, pero esto en el olivar resulta imposible. España lo peleó y ha conseguido que los cultivos permanentes, cumplan con el “Pago verde” de por sí. Solo está la condición de que no pueden albergar más de 250 árboles por hectárea. De esta forma, solo quedaría fuera el 95% del olivar de la provincia o, dicho de otro forma, los superintesivos. No obstante, estos sí que pueden agarrar el “Pago verde” si siembran otros elementos en la misma finca.
Por ello, las nuevas ayudas se regularán con un 55 o 60% en pagos directos, un 30% de “Pago verde”, entre un 13 y 15% acoplada a la producción y el resto como apoyo para jóvenes y pequeños agricultores. El Ministerio acude con la idea de sacar hacia adelante esta propuesta. Nadie cobrará igual, pero se busca que exista poca diferencia entre la que había anteriormente,con lo que la negociación no ha de esperarse nada agradable.