La Unión Europea a dad luz verde a las nuevas normas sobre el etiquetado de aceite de oliva. Una buena noticia sin duda, para todos los productores de aceite, por que cuanto más sea endurerezcan las reglas de comercialización, a su vez ,pondrá más dificil su tarea a los defraudadores; y por ende, los usuarios podrán estar más tranquilos, sabiendo que tienen la información correcta en las etiquetas de aceite de oliva.
Los Estados miembros de la Unión Europea han dado luz verde a la revisión de las reglas de comercialización de aceite de oliva en la Unión Europea, con el objetivo de introducir normas más estrictas en el etiquetado con las que evitar engaños al consumidor sobre la calidad del producto, según han informado en fuentes comunitarias. La fecha prevista para que entren en vigor el 13 de diciembre de 2014 y obligarán a que la formulación del etiquetado sea “uniforme” y “no induzca a error al consumidor” escondiendo, por ejemplo, que la calidad del producto es inferior. Un fraude que, según Bruselas, ocurre a veces al indicar la calidad del aceite en un tipo de fuente (tamaño de letra) más pequeño que el resto del mensaje informativo.
La etiqueta deberá informar, también, de manera “más clara” sobre el mejor modo de conservación del producto e indicar que la botella debe guardarse resguardada de la luz y el calor, para mantener su calidad. Además, se podrá indicar con carácter voluntario, la fecha de recolecta siempre que todo el aceite del recipiente provenga de la misma cosecha, ya que la calidad del aceite puede deteriorarse aunque sea posible su consumo durante años. Personalmente pondría la fecha de recolección obligatoria, cuanto más información podamos dar los oleicultores en nuestros productos, más complicado tendrán los “getas” aprovecharse de nuestro trabajo, producto y nuestra imagen.
Los gobiernos nacionales estarán obligados a vigilar que estas nuevas normas se cumplan y a realizar controles, así como a tomar medidas si se vulneran las reglas.
La decisión ha sido adoptada por el comité de gestión competente que forman expertos de los Veintiocho con una mayoría de votos a favor y ninguno en contra, aunque sí con la abstención de Alemania, (para no variar, cuando no es uno, es otro, o los Alemanes o los Ingleses) Estonia, Letonia, Hungría, Austria y Suecia; esta parte la he puesto remarcada en negrita, no por que sean estos países importantes, si no por que siempren están en la oposición intentando evitar que nuestros productos copen sus mercados, que nuestra agricultura conozca el mundo que es mejor que la que tienen ellos. Parece que la Alemania que nos salvó (según algunos) de la ruina o banca rota del país, parece raro que sea la que siempre está atenta para boicotear nuestros productos, sobre todo los agrícolas.
El comisario de Agricultura, Dacian Ciolos, promovió hace meses un paquete similar de medidas para apoyar al sector olivarero, pero finalmente decidió aparcarlo por las presiones de Reino Unido en contra de obligar a la hostelería a sustituir las aceiteras tradicionales servidas a los clientes por otras selladas y no reutilizables. Al menos hubo países que en este tema fueron por libre mucho antes que el comisario, y países como Portugal e Italia -principales productores de aceite de oliva– ya aplicaban en su territorio el veto a las aceiteras reutilizables en bares y restaurantes, curiosamente España, primer país productor del mundo en aceite de oliva fué el último en subirse a este carro de prohibir las aceiteras reutilizables, apenas hace unos meses, pero bueno, más vale tarde que nunca. Aunque insisto, España como primer país productor debería haber abanderado todas estas iniciativas que sin duda algo alivarian la delicada situación del agricultor, del olivo, del aceite.
Por otro lado y según os informaba en nuestro Facebook en la noticia publicada el 26 de este mes. Eñ día 27 de noviembre a las 12 horas, se presentó en el Salón de Grados del Edificio D1 (Zabaleta) el acto de presentación del Diccionario de términos del aceite de oliva (español-inglés-chino) del que es autora la profesora del Departamento de Filología Española, la Profª. Dra. Mercedes Roldán Vendrell.
Este diccionario busca facilitar la comunicación especializada en el área científica y socioeconómica del olivar y el aceite de oliva. Se trata del primer diccionario multilingüe dedicado a la terminología oleícola que se elabora desde los presupuestos de la lingüística aplicada al estudio y descripción de las lenguas de especialidad. Recoge 410 términos en español y establece sus equivalencias en dos lenguas clave en el contexto del mercado internacional como son el inglés y el chino.
Está dirigido tanto a especialistas y empresarios del sector, como a mediadores lingüísticos (traductores y periodistas) y lectores no expertos en la materia. Está prevista su edición en formato electrónico para tabletas y libros. En la presentación del diccionario, la autora ha explicado que el trabajo está financiado por la Junta de Andalucía dentro del proyecto ‘Terminología del aceite de oliva y comercio: China y otros mercados internacionales’.