Si hace unos meses este mismo país ponían en duda los controles de calidad y seguridad del aceite europeo, a través de la publicación de un informe, ahora, Estados Unidos estudia la posibilidad de dificultar en la posible la entrada de aceite en ese país por medio no arancelarios, como pueden ser controles de acceso y requisitos necesarios para su entrada. Si antes se examinaba y evaluaba el 5% de las entradas, ahora se está estudiando la posiblidad de realizar esos controles al 100% de las entradas y de paso disuadir a los exportadores españoles de vender aceite allí.

Todo esto viene por que entienden que el olivar europeo está demasiado subvencionado y podría haber compentencia desleal con respecto al de EEUU, algo que no se entiende, teniendo en cuenta la población y su producción, que apenas asciende a 10.000 toneladas.

El mercado norteamericano constituye uno de los más importantes para los productores españoles: la demanda de la primera economía del mundo asciende en la actualidad a 270.000 toneladas, de las que 52.000 (cerca del 20%) son oficialmente españolas.