Jul 03

El origen del olivo.

origen del olivo

origen del olivo

El momento histórico concreto del origen del olivo es algo que sigue siendo a de hoy incierto. El árbol del olivo es conocido desde la existencia del hombre, de la aparición de restos de hojas de olivo de gran antigüedad, por tanto, es una de especies arbóreas más antiguas que se conocen.
Existen varias teorías e hipótesis acerca de la zona de origen del olivo. Unas consideran que el olivo es originario de Siria e Irán; otras, del norte de Afganistán la última, más conciliadora, establece que proviene de ambas zonas.

Por tanto, ¿Dónde aparecieron los primeros olivos? Los indicios apuntan a que muy cerca del país que los asirios llamaron Urartu, por la zona de Anatolia Oriel y el altiplano Irónico, justo al sur del Caucásico, en un área rodeada por tres ma y cerrada a Occidente por Persia, al Oriente por Asia Menor, al Norte por el  Ararat y al sur por la frotera Sirio-Iraquí. Los restos de hojas fósiles encontradas el sur del archipiélago cicládico (entre la Grecia continental y el extremo suroccidental de Asia anterior) nos informan de que el antepasado del olivo ya se encontraba el Paleolítico unos 35.000 años a. C., por lo que podemos comprobar que este saga árbol acompaña al hombre desde el comienzo de su existencia. Además, existen vestigios relacionados con el olivo en los yacimientos encontrados en Italia. También se encontraron restos fosilizados en el norte de África que corresponde al Paleolítico Superior (12.000 años a. C) plena cultura del hombre de Cro-Magnon.
Los restos más antiguos encontrados en España son los de El Garcel (Almer y datan del Neolítico (5.000 años a. C).

No obstante, según Juan Eslava Galán en discurso inaugural en el I Congreso de Cultura del Olivo (Jaén, 2005) “…siglos antes de que los fenicios trajeran el olivo cultivado, los andaluces aprovechaban el aceite acebuche en sus ritos y, es posible, que también en su cocina. En la famosa cueva Nerja, en Málaga, se han encontrado huesos de acebuche de hace 10.000 años”.
En el Museo Arqueológico de Heraklion, en Creta, se conservan unos frescos más de 3.500 años de antigüedad que se pintaron en los muros del palacio de Cnosos, aunque la primera representación conocida acerca del olivo son las pinturas rupesi de Tassili (Argelia), en el norte de África, representando a hombres coronados ramas de olivo, realizadas entre el V y el VI milenio a. C.
Son muchas las utilidades que le dieron al aceite de oliva en la antigüedad asemejan mucho unas civilizaciones a otras, lo que deja claro su importancia aquella era. Por ejemplo, se conoce que hace más de 5.000 años se usaba el aceite la iluminación de palacios y templos.

Fuente: El sector internacional de elaboración de aceite de oliva: un estudio descriptivo de los distintos países productores.

Autores:

  • Juan Vilar
  • J. Rafael Cárdenas
  • Antonio Estévez

Foto:pampamotril.wordpress.com

Abr 09

El origen del olivo

NewPhytologist

Revista que ha publicado el artículo

Un estudio interdisciplinar ha indagado sobre el origen del olivo, este trabajo realizado por investigadores de la Universidad de Córdoba (con colaboración de la Universidad norteamericana de Irvine), y publicado en la revista especializada «New Phytologist», ha intentado explicar cuándo se «domesticó» el olivar y cómo se diseminó por la cuenca del Mediterráneo. Para ello, han participado expertos en Agronomía, como Concepción Díez, y el historiador Pedro Marfil, de Filosofía y Letras.

El método ha sido, inicialmente, de comparación de ADN, asegura Concepción Díez. La Universidad de Córdoba dispone de un banco con 400 variades de olivo de todo el Mediterráneo que han sido sometido a comparaciones.  El asunto se resume en un ámbito, el Mare Nostrum, con siglos de cultura del aceite, el vino y el cereal que generaron grandes movimientos económicos.

La idea principal es que hubo un centro primigenio en el que el olivo dejó de ser una especie silvestre para convertirse en un cultivo. Y eso ocurrió en un punto donde determinadas civilizaciones empezaron a disponer de los recursos para ello. En concreto, en una zona entreTurquía y Siria. El estudio ha indagado en el árbol genealógico del olivar. O mejor dicho, de los distintos tipos de olivo.

La comparación ha acabado con la clasificación de tres tipos de variedades por sus similitudes genéticas. Se llaman Q1, Q2 y Q3. Y tienen un reparto homogéneo,explicable por razones históricas, por el comercio.

El tipo Q1 de las variedades de olivar son los más habituales en Andalucía, explica Concepción Díez, los que se pueden ver en el campo de cualquier municipio de Córdoba aunque también en Portugal. Hermanos a su vez de los que se encuentran en Marruecos y el Norte de África. Con amplias influencias tanto del comercio marítimo fenicio y de los cultivos bereberes, que poblaron de olivos las zonas montañosas de lo que hoy se llama Magreb.

El tipo Q2 de olivos es el que se encuentra en la zona central de la orilla Norte del Mediterráneo, desde el Levante español hasta Cataluña, la mayor parte de Italia y Grecia. Mezclado muy particularmente con variedades locales de olivo silvestre y origen, puestos a teorizar, de un segundo foco de diseminación del cultivo del olivar. Responde a la relevancia del mundo griego en esta parte del mundo a la que llevó sus colonias, su cultura y sus olivos.

El Q3 tiene que ver con el caldo primigenio en el que se desarrolló la cultura del aceite de oliva: Oriente Próximo.

Aquí vienen las ramificaciones que tienen que ver con la historia. Las variedades de olivar Q1 -las más comunes en Andalucía- guardan un parentesco genético con las Q3, que son las que abundan en Israel o Siria. Tiene sentido histórico, explica la investigación, que fuesen los fenicios quienes difundieran esas variedades originariamente en el sur del Mediterráneo.

O que el periodo de máxima relevancia musulmana fuese un vehículo idóneo para que se produjese esa llegada de material genético. Una de las cuestiones clave, explica la investigadora, es que en la península ibérica existían variedades silvestres propias. Los investigadores remarcan que lo que no existían eran civilizaciones tan desarrolladas,capaces de generar ese cultivo de forma masiva.

El llamado tipo Q2 -Levante, Cataluña, Italia, Grecia- tiene la particularidad de que nunca dio el salto a América. Sus límites se encuentran, explica Concepción Díez, en lo que fue la Corona de Aragón. Las variedades americanas estudiadas son primas del tipo Q1. Esto es, andaluzas, bereberes, un poco fenicias. Y tiene que ver con que fueron los castellanos quienes tuvieron el monopolio del comercio con el Nuevo Mundo.

Si queréis ampliar información al respecto, os pongo el enlace de un artículo publicado en 2007  de título (si el enlace se rompe, podéis encontrar el artículo buscándolo a través de la base de datos de Dialnet ).

Origen y domesticación del olivo en Andalucía (España) a partir de los hallazgos arqueológicos de “Olea europea” L.

Autores: María Oliva Rodríguez Ariza, Eva Montes Moya

Localización: I Congreso de la Cultura del Olivo, 2007, ISBN 978-84-96047-57-0

 

Fuente: sevilla.abc.es